Instalaciones fotovoltaicas

Tipos de instalaciones

Conectadas a red

Autoconsumo

Unifamiliar: instalación propia en la vivienda.

Colectivo: una única instalación compartida por varios usuarios. Comunidades.

Huertos solares: instalaciones expresamente dedicadas a la venta de energía.

Aisladas

Aquellas instalaciones que no disponen de un punto de suministro eléctrico.

Autoconsumo en viviendas

El autoconsumo fotovoltaico consiste en la producción de energía eléctrica para el consumo propio a través de paneles solares fotovoltaicos.

Estos paneles transforman la luz solar incidente sobre ellos en electricidad gracias al efecto fotoeléctrico. La corriente que se genera es continua, y no apta para los equipos de nuestra vivienda, por lo tanto, se requiere de un inversor que transforme esta corriente continua en corriente alterna.

Además del uso de paneles solares e inversor, se instalan equipos de protección y medida que aseguran el correcto funcionamiento de la instalación, así como accesorios (cableado, anclaje, estructrura, optimizadores).


En una instalación de autoconsumo , la energía necesaria para su vivienda procede de las placas solares, siempre que haya producción. La energía que no se consuma se vierte directamente a red, y en los momentos en los que la producción solar no sean suficientes, se cogería de red.


Ejemplo de la monitorización de una instalación realizada de 6 kW: